Entre enero y diciembre de 2024, Brasil registró un aumento del 9,2% en el área tratada con defensivos agrícolas, totalizando más de 2 mil millones de hectáreas. Los datos provienen de una investigación encargada por el Sindicato Nacional de la Industria de Productos para la Defensa Vegetal (Sindiveg) y realizada por Kynetec Brasil. El estudio señala a la soja como el principal cultivo responsable de esta expansión en el uso de defensivos.
La investigación revela que el volumen de defensivos agrícolas utilizados para el control de plagas, enfermedades y malezas creció un 8,5% en comparación con el mismo período de 2023. La distribución de este total está compuesta por herbicidas (45%), insecticidas (23%), fungicidas (23%), tratamientos de semillas (1%) y otros (8%).
Para el análisis, se utilizó la métrica denominada PAT (potencial de área tratada o área tratada por producto), que considera el número de aplicaciones y la cantidad de productos en el tanque utilizados para el control de diversas plagas, enfermedades y malezas. En total, el área tratada se distribuye entre soja (56%), maíz (16%), algodón (8%), pastizales (5%), caña de azúcar (4%), trigo (3%), frijol (2%), hortalizas y frutas (2%), cítricos (1%), café (1%), arroz (1%) y otros (2%).
El valor de mercado medido por el precio pagado por el consumidor final alcanzó los 18 mil millones de dólares en 2024, lo que representa una caída del 10,3% en comparación con el año anterior, cuando se registraron 21 mil millones de dólares.
En términos regionales, el valor de mercado de los defensivos agrícolas está principalmente concentrado en Mato Grosso y Rondônia (28%), São Paulo y Minas Gerais (18%), Bamatopiba (15%), Rio Grande do Sul y Santa Catarina (11%), Paraná (10%), Mato Grosso do Sul (8%), Goiânia y el Distrito Federal (8%) y otras regiones (3%). El crecimiento observado se atribuye a una mayor infestación de plagas, como orugas, chicharritas y mosca blanca.
Cosecha 24/25 mantendrá una tendencia al alza en PAT
Para la cosecha 2024/2025, se proyecta que el área tratada con defensivos agrícolas crezca un 6%, manteniéndose por encima de los 2 mil millones de hectáreas del año anterior. Esta área debería distribuirse entre soja (55%), maíz (17%), algodón (8%), pastizales (5%), caña de azúcar (4%), trigo (3%), frijol (2%), hortalizas y frutas (2%), café (1%), cítricos (1%), arroz (1%) y otros (1%).
En el caso de la soja, el área tratada debería crecer un 7%, con énfasis en el combate de chinches (4,9%) y orugas (14,6%).
Por Wellington Torres / Revista Cultivar